EL RADIADOR PIRÓMANO
Hola de nuevo!, esta vez me voy a salir un poco del guión de las últimas entradas y voy a dejar aparcado el cuaderno de viaje del INTERRAIL013 para contaros una anécdota que me ocurrió en Praga. Si, ya se que acabo de hablar en el cuaderno de viaje de Praga pero mi intención es crear un apartado con las anécdotas de viajeros despistados o como yo simplemente imbéciles...
Todo comenzó en la habitación del Hostel Sport, una habitación amplia y limpia (hasta que llegamos nosotros...), una vez allí decidimos hacer la colada, cosa que no habíamos hecho en nuestra vida, y pusimos la lavadora; no sé si centrifugamos, limpiamos, suavizamos... ¿pero qué dice este tío? -pues eso, que ni idea casi de lo que era una lavadora. A los 20 minutos comenzó a pitar y al parecer estaba lavada... ¿raro? - no lo sé... Trasladamos la ropa de la lavadora a nuestra habitación dónde teníamos un "tenderete", nos dimos cuenta de que no teníamos más ropa limpia de la que teníamos puesta y la idea era la de salir aquella noche, por lo que era imposible que le diera tiempo a secarse; ¿qué se nos ocurrio? -Pues bien, había un calefactor (tipo tostadora pero gigante) de esos antiguos que sólo con encenderlos hacen un ruido que no sabes si eso va a explotar o qué va a suceder...
Pusimos toda la ropa en el tenderete y pusimos el calefactor debajo, ¿que pasó?, que se metía la ropa por el calefactor y supusimos que se quemaría... (no lo encendimos en esa posición, no fuimos tan tontos... en esta situación...). Viendo que esa opción era totalmente inviable se me ocurrió la idea de poner el calefactor en posición horizontal apuntando hacia el tenderete para secar la ropa; lo enchufamos y todo parecía correcto, nos felicitamos por el hallazgo y nos pusimos a beber unas cervejuelas...
Recuerdo que estábamos viendo un programa deportivo en alemán cuando Xubi (compañero de viaje, para saber más AQUÍ) se giró y dijo: ¡Qué se quema, que está ardiendo!, inmediatamente después me giré y vi una llama como de unos 15-20 cm saliendo del calefactor, en ese momento y saliendo bastante humo del calefactor me armé de valor y me dirigí al calefactor pensando muy seriamente que eso podía explotar... a la par empecé a escuchar como Xubi no podía menos que reírse y empezó a decir: ¡Pero no lo apagues, hazle antes una foto! JAJA (creerme que yo en ese momento estaba acojonado). Conseguí desenchufar el calefactor y poco a poco la llama fue remitiendo... Después de tranquilizarnos un poco y conseguir ventilar un poco la habitación descubrimos que lo que había ardido era una cantidad indecente de pelusas que, al poner el calefactor horizontal, habían entrado en el tubo calefactor, valga la redundancia, y habían prendido... Después de retirar las pelusas volvimos a intentar secar la ropa con el calefactor y ya no hubo problemas, aún así alguno de nosotros acabó saliendo con los pantalones mojados y un poco sucios... Al parecer la colada no había tenido el éxito que creíamos...
MORALEJA: Más vale ropa húmeda que calefactor tumbado!!!
¿Os a ocurrido algo parecido? Os animo a dejar vuestras anécdotas, yo también quiero conocerlas!!
Todo comenzó en la habitación del Hostel Sport, una habitación amplia y limpia (hasta que llegamos nosotros...), una vez allí decidimos hacer la colada, cosa que no habíamos hecho en nuestra vida, y pusimos la lavadora; no sé si centrifugamos, limpiamos, suavizamos... ¿pero qué dice este tío? -pues eso, que ni idea casi de lo que era una lavadora. A los 20 minutos comenzó a pitar y al parecer estaba lavada... ¿raro? - no lo sé... Trasladamos la ropa de la lavadora a nuestra habitación dónde teníamos un "tenderete", nos dimos cuenta de que no teníamos más ropa limpia de la que teníamos puesta y la idea era la de salir aquella noche, por lo que era imposible que le diera tiempo a secarse; ¿qué se nos ocurrio? -Pues bien, había un calefactor (tipo tostadora pero gigante) de esos antiguos que sólo con encenderlos hacen un ruido que no sabes si eso va a explotar o qué va a suceder...
Pusimos toda la ropa en el tenderete y pusimos el calefactor debajo, ¿que pasó?, que se metía la ropa por el calefactor y supusimos que se quemaría... (no lo encendimos en esa posición, no fuimos tan tontos... en esta situación...). Viendo que esa opción era totalmente inviable se me ocurrió la idea de poner el calefactor en posición horizontal apuntando hacia el tenderete para secar la ropa; lo enchufamos y todo parecía correcto, nos felicitamos por el hallazgo y nos pusimos a beber unas cervejuelas...
Recuerdo que estábamos viendo un programa deportivo en alemán cuando Xubi (compañero de viaje, para saber más AQUÍ) se giró y dijo: ¡Qué se quema, que está ardiendo!, inmediatamente después me giré y vi una llama como de unos 15-20 cm saliendo del calefactor, en ese momento y saliendo bastante humo del calefactor me armé de valor y me dirigí al calefactor pensando muy seriamente que eso podía explotar... a la par empecé a escuchar como Xubi no podía menos que reírse y empezó a decir: ¡Pero no lo apagues, hazle antes una foto! JAJA (creerme que yo en ese momento estaba acojonado). Conseguí desenchufar el calefactor y poco a poco la llama fue remitiendo... Después de tranquilizarnos un poco y conseguir ventilar un poco la habitación descubrimos que lo que había ardido era una cantidad indecente de pelusas que, al poner el calefactor horizontal, habían entrado en el tubo calefactor, valga la redundancia, y habían prendido... Después de retirar las pelusas volvimos a intentar secar la ropa con el calefactor y ya no hubo problemas, aún así alguno de nosotros acabó saliendo con los pantalones mojados y un poco sucios... Al parecer la colada no había tenido el éxito que creíamos...
MORALEJA: Más vale ropa húmeda que calefactor tumbado!!!
¿Os a ocurrido algo parecido? Os animo a dejar vuestras anécdotas, yo también quiero conocerlas!!
PRAGA, LA CIUDAD DORADA (PARTE II)
Si habéis leído mi última entrada, sabréis que nos pasamos el día entero pateándonos Praga de arriba a abajo y aún así, nos quedaban cosas por ver... Al contrario que otros días despertamos bastante tarde y, cosa que nos extrañó, no nos llamaron la atención en el hostel aunque era día de check-out... La verdad es que en Praga se nos fue bastante de las manos la organización-colocación de la habitación y parecía que estábamos en un basurero... Hicimos el check-out y dejamos atrás el Hostel Sport en el que habíamos tenido buenas aventuras... Aquí la prueba:
Poco después de comer, bajamos de allí y nos perdimos... No sabíamos por donde se salía del parque hasta que nos encontramos con dos lugareños que nos indicaron medianamente bien... Al bajar de ver el Monumento Nacional nos dirigíamos a Letenske Sady, un lugar que nos había recomendado el hombre del hostel. Por el camino nos encontramos estos "bebés gigantes" y este edificio de lo más particular, y no, no es photoshop.
DÍA 9
Después de recoger y dejar en la estación central las mochilas (en las consignas) nos dirigimos a Park Vitkov "El parque con el área de 15 hectáreas es accesible al público todo el año. En el parque se encuentra el Monumento Nacional, recientemente reformado, donde se puede visitar la encrucijada de exposición permanente de la condición de Estado de Checoslovaquia Checa y, representando momentos históricos de nuestro país desde la creación de Checoslovaquia en 1918. En la azotea del edificio principal es también una terraza de reciente apertura que ofrece una hermosa vista panorámica de la ciudad."
Una vez en Park Vitkov y ver el Monumento Nacional (la verdad es que es impresionante, parece super pequeño, pero según vas acercándote te quedas impactado de su magnitud y belleza...) nos hicimos un par de fotos y decidimos comer... ¿dónde? pues "a la sombra del caballo"; creo que fue aquí donde agotamos las provisiones del viaje...
Llegamos a Letenske Sady, era un parque grandioso, con multitud de espacios verdes, parejas paseando, campos de fútbol... allí nos tumbamos durante un largo rato... Decidimos poco después que, como el tren salía a las 8 de la mañana, saldríamos de fiesta e iríamos de empalme al tren... Así que pusimos rumbo de la estación para cambiarnos e ir a cenar...
Cenamos uno de los menús habituales del INTERRAIL... ¡¡¡McDonal´s al canto!!! Al acabar de cenar pasamos por Wenceslas Square, donde como ya dije en el primer post de Praga es totalmente diferente verlo de día a verlo de noche... Nada más inmiscuirnos en Wenceslas Square nos vimos influenciados por tres o cuatro negros que primero nos alababan por ser españoles, algo curioso, y segundo nos ofrecieron desde droga hasta sexo... Al final nos echamos unas risas con aquellos personajes y seguimos nuestro camino... Si digo que en poco menos de 5 minutos nos asaltaron 6 o 7 tíos con panfletos sexuales seguro que me quedo corto... Poco después y tras un camino "complicado" (ya que nos volvimos a perder), entramos en la discoteca Karlovy Lazne, donde pasamos nuestras últimas horas en Praga y nos hicimos las últimas fotos en esta bella ciudad al amanecer...
Una vez en la estación recogimos las cosas y apenas media hora después estábamos en el tren de camino a Berlín dónde seguimos nuestra aventura ya con vistas en Ámsterdam...
PRAGA, LA CIUDAD DORADA Y EL SUICIDA DÍA 8
Amaneció un día soleado en la bella Praga, una ciudad "vieja", con grandes historias a sus espaldas, y por supuesto, esperando la nuestra. Llegamos sobre las 10 AM a Museum y nada más salir de la boca de metro vimos la Wenceslas Square (nada que ver esta plaza por el día que por la noche) y la gran cantidad de gente que había a ambos lados de la calle, vimos que, casualmente había un mercadillo en la parte central, por lo que estaba aún más repleto. El ambiente de mercado medieval que se respiraba junto con la cantidad de edificios históricos que te encuentras caminando en esta ciudad es una mezcla que os recomiendo.
Después de recorrer Wenceslas Square de arriba a abajo nos dirijimos a Old Town Square, a ver el famoso reloj astronómico de Praga y nos quedamos esperando a que dieran "en punto" para ver lo que sucedía con el reloj, sinceramente nos decepcionó un poco el "espectáculo", eso sí el reloj, al igual que la plaza entera, es increíble, está todo bañado en oro, todo dorado, los edificios son espectaculares y pases por donde pases te encuentras algo diferente... la plaza es un oasis para los viajeros cansados de las calles de Praga. Se encuentra entre varias iglesias,y podemos encontrar la torre del Ayuntamiento viejo que ofrece una vista panorámica de la Ciudad.
Nos tomamos unos minutos en la plaza y estuvimos sentados a la sombra un rato apreciando la plaza, poco después nos dirigimos dirección Teatro Nacional pero estaba en obras, una pena, así que no pudimos casi ni hacer unas fotos... Decidimos dejar el puente de Carlos para después, y decidimos ir a comer a Petrinske Sady (un parque dónde había una torre y unas vistas de la ciudad estupendas), aunque un suceso extraño se nos presentó cruzando el río... Vimos a lo lejos acercarse un par de coches de policía y una ambulancia, un poco más adelante vislumbramos un hombre calvo, con los cascos puestos y una litrona de cerveza de la mano; estaba apoyado en la barandilla del puente pero por fuera, cosa que nos extrañó y decidimos una vez que la policía llegó al lugar quedarnos por si se le ocurría saltar... Pasados unos minutos el hombre comenzó a bailar sin agarrarse mientras un hombre de la policía intentaba hablar con él y convencerle de que saliera de ahí. Poco después vimos como se acercaba otro coche de policía, pero este pasaba de largo y se dirigía a Strelecky ostrov (una "isla" en uno de los puentes dónde se podía alquilar hidropedales para estar en el río...), dónde los policías se hicieron con un hidropedal y se aproximaron al lugar por si al hombre se le ocurría saltar... Finalmente y tras unos minutos de tensión pensando en irnos y dejar al pobre hombre allí, ví como sin pensárselo dos veces saltó al río, y como después de caer y asomar su cabeza no podía casi ni mantenerse a flote, y gracias a que estaban allí los policías con el hidropedal, no se ahogó... Os dejo unas fotos de la experiencia:
Impactados y sorprendidos por "el suicida" nos dirigimos a Petrinske Sady, subimos arriba del todo y comimos sentados en la hierba admirando las vistas de la ciudad, después de comer Pedro se echó la siesta, hicimos unas fotos y nos dirigimos al Castillo de Praga y al Kings Garden, nos quedamos gratamente sorprendidos e impresionados con los jardines y el castillo, parecía una ciudad pequeña dentro de la propia Praga, tenía su propia guardia (tipo inglesa, de esa que no se pueden mover aunque hagas el payaso...), nos sentamos frente al Castillo 10 largos minutos vislumbrando el sorprendente trabajo arquitectónico y la preciosa fachada gótica de este Castillo... hay que destacar que se encuentra en una de las partes más altas de la ciudad por lo que te encuentras unas vistas increíbles de la ciudad...
Después de hacer estas fotos y de subir las escaleras de la primera imágen (que cansan bastante, todo hay que decirlo) bajamos hacia el Charles bridge, el famoso puente de Carlos; te encuentras gran variedad de imágenes religiosas esculpidas en el mismo material que el puente, además te encontrabas artistas repartidos a lo largo del puente haciendo fotos, caricaturas, vendiendo artesanía, candados (ya que el puente estaba lleno de candados "del amor")... Cruzamos el puente y pudimos ver unas grandiosas vistas del río que junto al verde de los parques y los grandiosos edificios hacían conjuntamente una imagen de las que no se olvidan fácilmente...
Después de estas fotos y de ver el puente en su máximo esplendor decidimos comprar la cena y volver al hostel después de un duro día en el que habíamos pateado Praga de norte a sur y de este a oeste... aunque volviendo al hostel nos encontramos con un muro muy peculiar en el que había tizas para escribir lo que quisieras, estaba cerca del John Lennon Pub, dejamos nuestra rubrica y nos fuimos a descansar esperando que llegara el día siguiente...
DÍA 8
Amaneció un día soleado en la bella Praga, una ciudad "vieja", con grandes historias a sus espaldas, y por supuesto, esperando la nuestra. Llegamos sobre las 10 AM a Museum y nada más salir de la boca de metro vimos la Wenceslas Square (nada que ver esta plaza por el día que por la noche) y la gran cantidad de gente que había a ambos lados de la calle, vimos que, casualmente había un mercadillo en la parte central, por lo que estaba aún más repleto. El ambiente de mercado medieval que se respiraba junto con la cantidad de edificios históricos que te encuentras caminando en esta ciudad es una mezcla que os recomiendo.
Después de recorrer Wenceslas Square de arriba a abajo nos dirijimos a Old Town Square, a ver el famoso reloj astronómico de Praga y nos quedamos esperando a que dieran "en punto" para ver lo que sucedía con el reloj, sinceramente nos decepcionó un poco el "espectáculo", eso sí el reloj, al igual que la plaza entera, es increíble, está todo bañado en oro, todo dorado, los edificios son espectaculares y pases por donde pases te encuentras algo diferente... la plaza es un oasis para los viajeros cansados de las calles de Praga. Se encuentra entre varias iglesias,y podemos encontrar la torre del Ayuntamiento viejo que ofrece una vista panorámica de la Ciudad.
Nos tomamos unos minutos en la plaza y estuvimos sentados a la sombra un rato apreciando la plaza, poco después nos dirigimos dirección Teatro Nacional pero estaba en obras, una pena, así que no pudimos casi ni hacer unas fotos... Decidimos dejar el puente de Carlos para después, y decidimos ir a comer a Petrinske Sady (un parque dónde había una torre y unas vistas de la ciudad estupendas), aunque un suceso extraño se nos presentó cruzando el río... Vimos a lo lejos acercarse un par de coches de policía y una ambulancia, un poco más adelante vislumbramos un hombre calvo, con los cascos puestos y una litrona de cerveza de la mano; estaba apoyado en la barandilla del puente pero por fuera, cosa que nos extrañó y decidimos una vez que la policía llegó al lugar quedarnos por si se le ocurría saltar... Pasados unos minutos el hombre comenzó a bailar sin agarrarse mientras un hombre de la policía intentaba hablar con él y convencerle de que saliera de ahí. Poco después vimos como se acercaba otro coche de policía, pero este pasaba de largo y se dirigía a Strelecky ostrov (una "isla" en uno de los puentes dónde se podía alquilar hidropedales para estar en el río...), dónde los policías se hicieron con un hidropedal y se aproximaron al lugar por si al hombre se le ocurría saltar... Finalmente y tras unos minutos de tensión pensando en irnos y dejar al pobre hombre allí, ví como sin pensárselo dos veces saltó al río, y como después de caer y asomar su cabeza no podía casi ni mantenerse a flote, y gracias a que estaban allí los policías con el hidropedal, no se ahogó... Os dejo unas fotos de la experiencia:
Impactados y sorprendidos por "el suicida" nos dirigimos a Petrinske Sady, subimos arriba del todo y comimos sentados en la hierba admirando las vistas de la ciudad, después de comer Pedro se echó la siesta, hicimos unas fotos y nos dirigimos al Castillo de Praga y al Kings Garden, nos quedamos gratamente sorprendidos e impresionados con los jardines y el castillo, parecía una ciudad pequeña dentro de la propia Praga, tenía su propia guardia (tipo inglesa, de esa que no se pueden mover aunque hagas el payaso...), nos sentamos frente al Castillo 10 largos minutos vislumbrando el sorprendente trabajo arquitectónico y la preciosa fachada gótica de este Castillo... hay que destacar que se encuentra en una de las partes más altas de la ciudad por lo que te encuentras unas vistas increíbles de la ciudad...
Después de estas fotos y de ver el puente en su máximo esplendor decidimos comprar la cena y volver al hostel después de un duro día en el que habíamos pateado Praga de norte a sur y de este a oeste... aunque volviendo al hostel nos encontramos con un muro muy peculiar en el que había tizas para escribir lo que quisieras, estaba cerca del John Lennon Pub, dejamos nuestra rubrica y nos fuimos a descansar esperando que llegara el día siguiente...
TRENES, HOSTELES Y DISCOTECAS... DÍA 7 (LLEGAMOS A PRAGA)
TRENES, HOSTELES Y DISCOTECAS...
Os conté en la entrada anterior que habíamos decidido quedarnos una noche más en Viena... pues bien, casi perdemos el tren a Praga, de puro milagro: nos despertamos tarde, teníamos que coger dos metros (de los cuales, perdimos uno...) hacia la estación central de Viena, no encontrábamos nuestra vía... en fin, que llegamos corriendo y sudando junto a una manada de japoneses cinco minutos antes de la salida...
Salimos a dar una vuelta por Praga aunque sin ir a ningún lugar concreto, cambiamos unos pocos de euros y nos fuimos al hostel a cenar para coger fuerzas para lo que se nos avecinaba en la noche fiestera 1 de Praga. Cenamos, cogimos el último metro, que sería sobre las 11, y nos dirigimos a la discoteca Karlovy, de la que teníamos alguna que otra referencia, no sin antes echar unas fotos desde la orilla del río a la Praga nocturna e iluminada. Llegamos a la discoteca y nos pusimos a la cola, nos cachearon y entramos, previo pago de 380 coronas, unos 6,5€, dentro conocimos a un madrileño que estaba de vacaciones con un amigo checo, nos fumamos un puro a su salud y unas cervezas y decidimos pasadas las 4 irnos al hostel, no recuerdo como pero llegamos, nos dormimos esperando a Praga, donde lo mejor estaba por llegar...
Os conté en la entrada anterior que habíamos decidido quedarnos una noche más en Viena... pues bien, casi perdemos el tren a Praga, de puro milagro: nos despertamos tarde, teníamos que coger dos metros (de los cuales, perdimos uno...) hacia la estación central de Viena, no encontrábamos nuestra vía... en fin, que llegamos corriendo y sudando junto a una manada de japoneses cinco minutos antes de la salida...
La verdad es que el tren iba prácticamente vacío y pudimos tumbarnos en dos asientos sin problemas aunque no nos dormimos... bueno todos sabéis ya quien era el que dormía no? Efectivamente...
Después de unas tres-cuatro horitas llegamos a Praga, y lo primero que hicimos fue ir al hostel, el cual estaba en los suburbios de Praga, un barrio que era el típico de pasar droga... claro fuimos a lo barato... jaj.
Eso sí del hostel ninguna queja, nos dejaron llaves de la puerta de fuera (ya que era un piso con habitaciones), el check-out era a la hora que quisieras, eran habitaciones privadas... Comimos y pasada media hora la habitación, sin saber como, presentaba este aspecto:
VIENA, MI AMOR PLATÓNICO PARTE II (DÍA 6)
DÍA 6
Comenzó el día de manera habitual, pero sin resaca, nos levantamos y bajamos a desayunar... poco después dejamos las mochilas en un cuarto del hostel ya que nos iríamos por la noche destino Praga. Salimos de camino sobre las 9 para visitar la Ópera, aunque por la cola tardamos otra horita en entrar, de la que bien podría sacar un álbum entero, por fuera no era nada del otro mundo (comparado con Viena en general), eso sí, fue cruzar la puerta y encontrarte en otro siglo, otro mundo, era algo mágico, cantidad de gente disfrazada con las famosas pelucas blancas con rulos, los rojos y dorados del interior, los palcos, las estatuas... Os dejo unas fotitos para que lo comprobéis:
Esto último de la izquierda no recuerdo exactamente que era y la verdad que lo pillamos de bastante suerte, aunque me alegro de habérmelo encontrado...
Finalmente nos dirigimos al hostel, cenamos e inquietos esperábamos nuestra nueva amiga, Praga, la cual nos dejó detalles que no olvidaremos en la vida...
Comenzó el día de manera habitual, pero sin resaca, nos levantamos y bajamos a desayunar... poco después dejamos las mochilas en un cuarto del hostel ya que nos iríamos por la noche destino Praga. Salimos de camino sobre las 9 para visitar la Ópera, aunque por la cola tardamos otra horita en entrar, de la que bien podría sacar un álbum entero, por fuera no era nada del otro mundo (comparado con Viena en general), eso sí, fue cruzar la puerta y encontrarte en otro siglo, otro mundo, era algo mágico, cantidad de gente disfrazada con las famosas pelucas blancas con rulos, los rojos y dorados del interior, los palcos, las estatuas... Os dejo unas fotitos para que lo comprobéis:
Estuvimos como una hora visitando la Ópera y cuando nos quisimos dar cuenta era la hora de comer, nos sentamos en un parque cercano y después de comer Pedro hizo lo que tanto le gusta, dormir en la hierba cual marrano duerme en el barro... vamos que se lo pasó de puta madre:
Tras unos juegos con la hierba y con Pedro, nos dirigimos al Prater, para mí fue un parque de atracciones sin gitanos... estuvimos cosa de una hora y tras una larga charla decidimos, ya que los horarios no nos cuadraban, quedarnos otra noche en Viena y coger el primer tren de la mañana hacia Praga. Poco después fuimos a ver los jardines Belvedere... IMPRESIONANTE, nada más que decir:
Esto último de la izquierda no recuerdo exactamente que era y la verdad que lo pillamos de bastante suerte, aunque me alegro de habérmelo encontrado...
VIENA, MI AMOR PLATÓNICO PARTE I (DÍA 5)
VIENA, MI AMOR PLATÓNICO
Despertamos aquella mañana soleada en el Hostel Hütteldorf con ganas de visitar Viena, poco después, bajamos a desayunar (buffet incluido en el hostal). Cogimos el metro dirección a la Ópera y al palacio de Hofburg. Según íbamos andando y reconociendo el terreno, nos llevamos una gran primera impresión... esos palacios, esos edificios... era íncreible... Llegamos al palacio de Hofburg y vimos sus jardines, era precioso, estando allí te quedan ganas de quedarte para siempre... de hecho Viena es una de las ciudades apuntadas en mi agenda para volver a ir en un futuro. Cada paso que das, ves
como esta ciudad tiene una pasión increíble por la música, estatuas
de Mozart, Strauss... claves de sol, referencias musicales... es una ciudad que tiene vida propia...Una de las cosas que me sorprendió de Viena era que puedes entrar en cualquier museo gratis si eres menor de 19 años...
Despertamos aquella mañana soleada en el Hostel Hütteldorf con ganas de visitar Viena, poco después, bajamos a desayunar (buffet incluido en el hostal). Cogimos el metro dirección a la Ópera y al palacio de Hofburg. Según íbamos andando y reconociendo el terreno, nos llevamos una gran primera impresión... esos palacios, esos edificios... era íncreible... Llegamos al palacio de Hofburg y vimos sus jardines, era precioso, estando allí te quedan ganas de quedarte para siempre... de hecho Viena es una de las ciudades apuntadas en mi agenda para volver a ir en un futuro. Cada paso que das, ves
como esta ciudad tiene una pasión increíble por la música, estatuas
de Mozart, Strauss... claves de sol, referencias musicales... es una ciudad que tiene vida propia...Una de las cosas que me sorprendió de Viena era que puedes entrar en cualquier museo gratis si eres menor de 19 años...
Poco después nos dirigimos hacia el Parlamento (lo que más me gustó de Viena) dónde casualmente se celebraba la última etapa de ciclismo de la Vuelta a Austria y pudimos ver el sprint final, tras unas fotos nos dirigimos a comer...
Después de comer fuimos a echar la siesta a un parque cerca del Parlamento, dónde Xubi y yo nos tomamos un par de chupitos de Vodka, más tarde nos fuimos hacia la catedral de Viena, el centro histórico, dimos una vuelta, tiramos unas fotos y compramos la cena, volvimos al hostel dónde nos encontramos a los cuatro madrileños que vimos en Milán, después de una pequeña charla salimos a dar una vuelta nocturna por Viena...
CUADERNO DE VIAJE: MI EXPERIENCIA INTERRAIL, DÍA 4
DÍA 4, LOS HOLANDESES ERRANTES Y EL... "AN MOMENT"
Llegamos a Viena sobre las 5 de la tarde y lo primero que hicimos fue ir a una farmacia, ya que el querido Hostel California de Milán me había dejado unas picaduras en las piernas con las que no podía ni andar... una vez que salimos de la farmacia nos dirigimos al albergue, el Hostel Hüutteldorf (estaba un poco alejado del centro, pero en Viena, el metro "it´s free" (si no te pillan claro) así que no nos costó llegar). Una vez allí hicimos el check-in y nos quedamos toda la tarde en la habitación descansando del largo viaje...
En la habitación estábamos solos aunque, unas horas después, llegaron cuatro holandeses de unos 25 años para ocupar TRES camas, ya que la habitación era de seis. La historia de los holandeses es simple: guarros, fiesteros y morosos! Después seguiremos hablando de los holandeses...
Suscribirse a:
Entradas
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario