BERLIN, LA CIUDAD DE LAS LUCES, DÍA 11

¡Hola de nuevo! Abrimos aquí un nuevo episodio del cuaderno de viaje INTERRAIL013, como sabéis nos habíamos quedado pasando nuestra primera noche en Berlin con ganas de seguir la aventura y conocer la capital alemana... ¡Empezamos!



Despertamos en el hostel sobre las 9 de la mañana y después de informarnos sobre los Free Tour decidimos asistir a uno, así que nos presentamos en la Puerta de Brandenburgo (una de las puertas de entrada a Berlin cuando el muro estaba en pie, se ha convertido en uno de los símbolos majestuosos de la ciudad) dónde puedes encontrarte a un soldado con la bandera de EEUU y a otro con la bandera comunista... allí nos encontramos con los cuatro madrileños famosos que ya habíamos visto en Milán, Viena y Praga y nos asignaron el grupo en el que haríamos la visita guiada. Comenzamos por la misma Puerta de Brandenburgo y con un poquito de historia alemana la cual todos sabéis... De ahí nos dirigimos al Monumento del Holocausto pasando por el Führerbunker (el búnker de Hitler), para los que andéis un poco perdidos en historia alemana el Monumento del Holocausto fue construido de 2003 a 2005, se trata de una cuadrícula formada por 2.711 bloques de hormigón de diferentes alturas, que permite que los visitantes elijan su camino de entrada y salida. Desde el sureste del monumento, se puede acceder a un espacio subterráneo en el que se ubica el centro de información.













Desde el monumento del holocausto nos dirigimos al único edificio en pie de la época nazi, que casualmente es el edificio de hacienda alemana, antiguamente allí se ubicaba el gobierno de la RDA... avanzando un poco vimos unos trozos del muro de Berlin que estaban bastante deteriorados pero que aún se conservaban. Cuando nos quisimos dar cuenta estábamos inmersos en el Check Point Charlie que fue el paso fronterizo más famoso del muro de Berlin, hoy en día este Check Point es totalmente recreado, no quedó nada de lo original.

En este Check Point tuvo lugar una de las huidas de Berlin Este más trágicas de la historia dónde un obrero alemán quedó abatido en el medio de los dos "berlines" y murió desangrado ante la mirada de los soldados de Berlin Oeste. Después de estar un rato oyendo las explicaciones del guía nos dieron una media hora libre dónde pudimos hacer diversas compras y souvenirs...



Después de la media hora libre nos dirigimos a la Universidad, que la verdad, son unos edificios bastante imponentes. Allí nos entraron ganas de mear y nos metimos en uno de los edificios, yo creo que se estaba celebrando una graduación o algo por el estilo ya que todo el mundo iba en traje y vestuario elegante... pero ya véis allí estábamos tres españoles mochileros buscando el servicio... De allí nos dirigimos a la Isla de los Museos pero pasando antes por el memorial Neue Wache ("típico del neoclasicismo alemán, simple, limpio y donde una mujer llora a su hijo caído bajo una cúpula transparente"). Llegamos a la Isla de los Museos y a esos jardines donde las piernas nos agradecieron un descansito... Los museos que nos encontraremos en la isla son: Museo Antiguo, Museo Nuevo, Galería Nacional Antigua, Museo Bode, Museo de Pérgamo y la Galería James Simon. Nosotros no entramos en ninguno por falta de tiempo y sólo pudimos verlos por fuera cosa que tampoco te dejará indiferente... Y aquí es dónde acaba el Free Tour de Berlin (he de decir que no fuimos al Reicshtag porque estaba al lado de la Puerta de Brandenburgo y el guía nos explico cómo llegar desde allí), nos hicimos unas fotillas y decidimos ir a comer aunque antes nos encontramos con la Fuente de Neptuno.











Después de comer nos dirigimos al Reichstag o Parlamento alemán característico por su hermosa y grandiosa cúpula que desgraciadamente tengo aún en mis tareas pendientes en Berlin... La entrada para ver la cúpula es totalmente gratuita lo único que hay que reservar con bastante antelación en la web del Reichstag. Lo característico de esta cúpula es que puedes ver la cámara de debates y a los ministros trabajando mientras estás en la cúpula, además por supuesto de unas vistas preciosas de Berlin.

Nuestro siguiente objetivo era la Columna de la Victoria cosa que nos había recomendado el guía entre otras cosas porque subir a lo alto para ver Berlin era gratis, pues bien después de darnos una buena caminata y atravesar los jardines del Tiergarten dónde antiguamente era uno de los cotos de caza imperiales... ¡¡¡NO ERA GRATIS!!! (por lo menos ese día...). Volviendo de la Columna de la Victoria nos encontramos unas esculturas de osos (los osos promueven la tolerancia, la comprensión entre los pueblos y la paz entre las naciones del mundo). De allí nos fuimos a un museo de un campo de concentración que no recuerdo exactamente dónde estaba, es un museo interactivo aunque no conserva casi nada de la estructura original del campo de concentración.



Volvimos al hostel (dónde nos encontramos a un indio que habían alojado en nuestra habitación (era compartida) y el indio... ya estaba durmiendo...) después de un día duro pero los ánimos no habían decaído y decidimos salir de fiesta... y ¡Qué fiesta!, uno de los mejores sitios con diferencia en los que he estado, estuvimos en la discoteca Matrix que es algo así como una inmensa discoteca con varias salas en las que te encuentras infinitas personas de diferentes países... ¡eso sí!, estar en Berlin a las 4 de la mañana y que te pongan "La gasolina" no es algo que pasas por alto... Acabamos a las 8 de la mañana en el hostel con una borrachera contundente (no recuerdo ni cómo llegamos así que...) y viendo como el indio que estaba en la habitación ya estaba despierto y listo para irse a ver Berlín, nos sentimos... unos vagabundos, unos vagabundos desgraciados...